GUERRA EN LA
PENÍNSULA.
Esta es la
historia de 2 pueblos en guerra, son muy diferentes, cada uno con su historia y
religión pero vivían en el mismo territorio.
Esta es la
historia de cómo uno de esos pueblos iba a tener que desaparecer del
territorio.
En un
castillo de Navarra vivía un rey honesto, generoso e implicado en que todo su
reino estuviera bien, este hombre se llamaba Gastón de Góngora, su aspecto
físico es esbelto, ojos azules, con buena higiene personal y nunca llevaba ropa
lujosa.
Una tarde de
primavera le enviaron una carta del rey de Aragón que decía:
-Necesito
hablar con vos en persona, he sido enterado de algo urgente y necesito vuestra
ayuda. Venid a mi castillo lo antes posible”
Entonces
Gastón con su caballo fue hacia Aragón. Por el camino, ya de noche, encontró un
fuego a 50 metros del camino. Fue a mirar que era, allí había una reunión de
druidas. Estaban invocando a la diosa de la naturaleza y les iban a dar un sacrificio
humano, quemándolo vivo, este era otro druida me más o menos 45 años ya un poco
viejo, con barba blanca, bajito y nervioso, porque lo iban a sacrificar.
Entonces Gastón apareció entre la maleza, salto por encima de los druidas, al
lado de la hoguera, empuño su espada y grito.
-Como osáis
intentar quemar a alguien en mis tierras.
Los druidas fueron a por él e intentaron
tirarlo del caballo pero no lo consiguieron entonces desato rápido al druida y
salió corriendo. Ya a 100 metros, Gastón le pregunto sobre él.
-Me llamo
Raimundo, soy un druida de una tribu de los montes Vascos. Mi tribu y esta
tribu están peleadas desde hace un siglo, por estas hojas que he arrancado del
libro que querían. Sirve para controlar los 5 elementos naturales a la
perfección. Por salvarme la vida te seré fiel y siempre te ayudaré.
-Gracias,
vamos a parar y mañana seguimos nuestro camino… a es verdad, no te he informado
de donde me dirijo. Voy hacia Aragón, el castillo de Wilfredo el Rey de Aragón.
-Y usted de
que conoce al rey de Aragón.
-AHH,
tampoco te he dicho que soy Gastón de Góngora, rey de Navarra.
-De verdad,
he oído hablar de usted. Me han dicho que es usted el rey más generoso que ha
habido en Navarra.
-Yo no me
atribuyo ese mérito pero gracias por el cumplido, y ahora a dormir.
Partieron a
Aragón pronto y se fueron conociendo, ya para la tarde llegaron. Gastón y
Wilfredo se reunieron para hablar.
-Gastón me
he enterado de que Castilla y Portugal se pelean por conquistar tierras
musulmanas, a nosotros también nos han incluidos en esta guerra cristiana, es
una pelea a cinco bandas porque Al Ándalus está enterada y ahora estamos
desprotegidos lo reinos cristianos. A lo que iba, deberíamos aliarnos para la
guerra contra Castilla, Portugal y los musulmanes y si es posible conquistar
tierras musulmanas.
-Como pueden
ser tan rastreros los reinos de Castilla y Portugal pelearse por unos
territorios dejándonos desprotegidos de los ataques árabes, por esto tendrían
que colgarlos a todos.
-Bueno
deberías partir con mi ejército y con el tuyo a la batalla contra castilla. Yo
no puedo ir voy a negociar con el reino Galo para haber si nos ayudan. Ya me
han enviado un mensajero de que van a atacarnos. Mis espías me han informado de
que van atacar por el sur, mañana por la tarde. Sal hacia el campo de batalla… Ahh
y llévate a mi hijo y enséñale todo lo que sepas, puede ser tu escudero en muy
bueno con el arco.
-Vale iré
inmediatamente y le enseñare todo a tu hijo pero ten en cuenta que correrá
multitud de peligros.
Entonces
Gastón, Raimundo, el segundo hijo de Wilfredo, llamado Onofre y el ejército de
Aragón partieron a Navarra para recoger al otro ejército para luchar contra
Castilla.
Castilla el
reino más poderoso de la península, es un reino muy difícil de ganar, ya que
tiene uno de los mejores ejércitos de Europa occidental. Mientras íbamos hacia
Navarra Onofre nos iba contando cómo era la vida en ese castillo.
-Tapado por
mi hermano mayor en todo, a mi no me
hacían ni caso. Y yo le pedí a mi padre que te pidiera si podía irme contigo.
Entonces
Gastón le pidió a Raimundo que le educara para aprender el arte de ser druida.
Y el aceptó, pero que iba a ser muy complicado y duro.
Al llegar a
Navarra el día siguiente por la mañana, cogieron víveres y fueron a la frontera
hacia Castilla. Pero antes Gastón entregó una ballesta a Onofre para
defenderse.
Ya en la
frontera se encontraron como a dos kilómetros, venían las tropas de Castilla y
al frente con un elegante caballo de pura raza española con una preciosa y gran
espada de hierro y un escudo con la bandera en el centro se situaba Lázaro V.
Su ejército era de unos 5 mil hombres, el nuestro sería de mil de Navarra y dos
mil quinientos de Aragón.
Este rey tan
poderoso llamado Lázaro V. Fue descendiente del general que se mantuvo con los
pocos cristianos en las montañas del
norte y fundó el reino de Asturias.
Las tropas
de Gastón aunque en inferioridad no fueron intimidadas ante su gran ejército,
ellos ya estaban a solo a 250 metros a lo que ellos gritaron: ¡¡¡A POR
ELLOS!!!! Y corrieron hacia las tropas de Gastón. Entonces Gastón ordenó que
pusieran a los arqueros en primera fila
y dispararon, entre ellos estaba con su ballesta Onofre, después de disparar
los guerreros incluido Gastón con su espada que le regalo su padre en el lecho
de muerte con el escudo de navarra y con la inscripción “por un reino unido” el
batallón salió corriendo hacia el de Lázaro. La primera fila del Batallón de
Lázaro había muerto por las flechas, ya se enlazaron en la batalla, Gastón
mataba sin miramientos a todo el que estuviera delante, estuvo más de una vez
en peligro de muerte pero supo superarlo y Raimundo utilizaba sus poderes para sobrevivir.
Entonces ya superados unos metros Gastón se encontró con Lázaro V y se cruzaron las miradas, y fue como si se
parara el tiempo y se enlazaron fue como
si no existiera los demás pelearon durante un rato, ellos se dieron cuenta de
que del ejército de Gastón solo quedaban cien guerreros y Gastón estaba rodeado,
desde lejos Raimundo hizo un hechizo y rodeó a Gastón de llamas para que no le
hirieran. Y el ejército de Lázaro V se quedó muy sorprendido y Raimundo lo
transportó donde estaban ellos, solo quedaban Raimundo, Onofre y él. Salieron
corriendo hacia el bosque perseguidos por el ejército de Lázaro V. Entonces
Raimundo dijo:
-Voy a hacer un hechizo muy poderoso acercaos a mí, rápido. Dijo unas palabras en un dialecto desconocido y los tres empezaron a levitar con la sorpresa del otro ejército y rey Lázaro V gritando: ¡¡¡¡malditos brujos!!!!
-Voy a hacer un hechizo muy poderoso acercaos a mí, rápido. Dijo unas palabras en un dialecto desconocido y los tres empezaron a levitar con la sorpresa del otro ejército y rey Lázaro V gritando: ¡¡¡¡malditos brujos!!!!
Volaron por
las nubes, durante media hora, Gastón
impresionado dijo:
-Dios mío,
esto es impresionante, esta experiencia es la mejor que me ha pasado en mi
vida.
Entonces
empezaron a caer y cayeron en el feudo donde vive el rey Lázaro V, se
camuflaron entre la gente. Fueron a una posada para dejar la ropa y fueron a
comer y empezaron a hablar.
-Onofre
dijo, Gastón que vamos hacer… Como nos encuentren estamos muertos.
-Pues iré a
hablar con Lázaro para arreglar esta situación. Vosotros id a la plaza a
escuchar al juglar, creo que iba a hablar de EL CID CAMPEADOR.
-Vale, dijo
Raimundo y Onofre.
Entonces
mientras Gastón iba al castillo de Lázaro. Raimundo y Onofre fueron a la plaza
a escuchar al juglar:
-Antes de
empezar la historia el rey me ha dicho que os informe de que hay tres personas
de Navarra y Aragón entre ellos están el Rey de Navarra, un druida y el hijo
del rey de Aragón que deben ser capturadas vivas o muertas, el que lo las
traiga recibirá una recompensa de 1000 reales y se le otorgara uno de los
mejores terrenos de Castilla.
Raimundo y
Onofre asustados fueron lentamente alejándose de la plaza y fueron a reunirse
con Gastón.
Gastón hiendo
hacia el castillo encontró una muchedumbre de gente buscando y gritando: -Donde
estarán los fugitivos navarros, ya verán cuando les encontremos… entonces
Gastón cogió un callejón y fue directo al Castillo. Ya a 50 metros se encontró
con los guardias, así que no podía entrar. Miro hacia su alrededor y vio una
cuerda tirada en el suelo, la cogió, la ató a un caballo que pasaba con su amo
a trote y en la otra punta ato una bolsa de monedas de oro y se las arrojo a
los soldados, ellos codiciosos como nadie se lanzaron a por la bolsa y dejaron
la entra da libre que Gastón aprovecho para entrar. Ya en los pasillos había
mucha gente y tenía que pasar desapercibido, entro en una habitación y allí
mirándose al espejo estaba Lucrecia, una hermosa dama, que Gastón al verla se
quedo maravillado. A lo que ella dijo:
-¿Quién sois
vos?
-Yo me llamo
Gastón de Góngora, rey de navarra ¿y vos como os llamáis?
-Me llamo
Lucrecia, ¿y como habéis entrado aquí si vos no sois un fugitivo aquí en
Castilla?
-Sí, lo soy
pero quiero hablar con el rey para ver porque estamos en guerra, dudo que sea
por el motivo que me dio el rey de Aragón, ¿podéis ayudarme?
-Claro, pero
disfrázate toma unos ropajes míos.
-Ehhhh… no
sé si disfrazarme de mujer va a ser una buena idea…
-Es la única
manera de esquivar a los guardias.
Entonces las
2 doncellas, pasaron desapercibidas por los pasillos del castillo y mientras
iban al trono se iban contando cosas y Gastón se iba enamorando de ella.
-Ya hemos
llegado dijo ella quítate la ropa y el maquillaje, dudo que te tome en serio si
te ve así.
Entró Gastón
la sala del trono y Lázaro V con una cara de sorpresa dijo:
-Como habéis
entrado aquí.
-Con un poco
de maña… pero no he venido a discutir eso. ¿Por qué habéis iniciado esta
guerra.
-¿¡NOSOTROS!?
Si has sido tú, una fuente anónima le dijo a Calixto II, el rey de Portugal,
que tú con ayuda del pueblo galo ibais a atacar nuestras tierras.
-Pues a mi
Wilfredo me dijo que vosotros queríais conquistarnos porque os estabais
peleando por las tierras de la península.
-No, que va.
Si quieres vamos a Portugal para ver quién es la fuente anónima.
Mientras
tanto Raimundo y Onofre iban al castillo la muchedumbre les descubrió:
-¡¡A por
ellos!!
Entonces
ellos salieron corriendo hacia el castillo y toda la gente de alrededor se iba
uniendo a la muchedumbre. Ya estaban llegando al castillo cuando entre los
soldados y la muchedumbre los rodearon. Entonces Raimundo pronunció un hechizo y
la gente estaban a punto de alcanzarles con las espadas y armas, la tierra
empezó a elevarse e hizo una montaña con ellos dos en la cima, todos empezaron
a gritar y a insultarles, y ellos dos sin saber cómo salir de esta y de repente
Gastón y Lázaro salieron del castillo y vieron este panorama y Lázaro dijo:
-La oferta
se ha acabado no habrá recompensa alguna.
Ya todos se fueron y Raimundo canceló el hechizo.
Se presentaron Lázaro y Raimundo, y Lázaro le alago su maestría con la
brujería. Entonces cogieron los caballos y comida y se fueron rápidos a
Portugal, tardaron dos días en llegar. Al llegar al castillo de Calixto II y
Gastón se presentaron y empezaron a hablar:
-Gastón:
Hola, me llamo Gastón de Góngora y soy rey de Navarra.
-Hola yo
Calixto II rey de Portugal.
Estuvieron
hablando y conociéndose hasta que Calixto dijo:
-Mi fuente anónima me habían dicho que Navarra
y los Galos ibais a atacar a Portugal y Castilla.
-Y cuál es
tu fuente anónima.
- Ahhh, pues
mi fuente anónima es…
De repente
se abre la puerta de golpe y un soldado dice:
-Vienen los
musulmanes del general Bonifacio con un millón de soldados, por las montañas.
Entonces
todos los reyes, Raimundo y Onofre fueron a donde estaban los soldados de los
portugueses, eran un número muy reducido de soldados. A lo que dijo Calixto:
-Joder,
estamos acabados necesitemos un milagro.
Raimundo
miro detenidamente la montaña y se le ocurrió algo para salir de esta.
-Calixto
dile a tus tropas que se retiren y corran para en dirección contraria a las
montañas.
Ya sus tropas
a salvo, Raimundo pronuncio un hechizo y la montaña comenzó a temblar y a echar
magma, que tuvo tal erupción que saltaban de allí rocas de 5 metros de
diámetro, todos los musulmanes sorprendidos a la vez de aterrados corrieron
como pudieron pero no sobrevivieron más de cien y su general Bonifacio, que
fueron condenados a la hoguera por atacar al reino Portugués.
-Calixto: Mi
fuente anónima es Wilfredo, el rey de Aragón
-¡¡En
serio!! , él fue quien me dijo que vosotros hicisteis esta guerra por tierras
musulmanas.
-Calixto:
No, que va. Y que vamos a hacer.
-Gastón: Lo
tengo clarísimo, voy a coger a ese perro y ya verás cómo se le va a quedar la
cara…
-Lázaro:
Primero vamos a mi reino a por mi ejército para luchar contra este tipejo
mentiroso.
Entonces los
tres reyes y el ejército de Portugal fueron galopando hacia el reino de
Castilla, llegaron al castillo de Lázaro y un súbdito informo de la situación
en el castillo.
-Mi señor,
han secuestrado a Lucrecia, el secuestrador ha dejado una nota:
Si los
que están leyendo la carta sois los tres reyes cristianos, ya os habréis dado
cuenta quien os ha mentido. Os informo he secuestrado a la hija de Lázaro,
Lucrecia. No hace falta que vengáis a recuperarla porque en este momento me
estoy preparando para irme a ir al reino de Nápoles con ella, así que adiós.
Atentamente
Wilfredo.
-Lázaro:
Mierda, rápido vayamos a por mi hija a salvarla.
Entonces se
fueron ellos tres, Raimundo y Onofre, sin ejército ya que tenían que ir rápido.
Pero un ejército de Navarra se dirigía allí.
Ya en la
frontera entre Castilla y Aragón, se encontraron con un ejército aragonés para
que no llegaran a su destino.
-Onofre: Que
mierda, mi padre es subnormal nunca me ha querido lo odio a muerte, ya verás
cuando lo pille…
-Raimundo:
Tranquilo chico tienes que controlar tu ira, mira voy a dejar que hagas un
hechizo que nos salvara de esta.
Entonces
Raimundo les dijo a todos se subieran a el árbol enorme que había cerca.
Raimundo le enseño un trozo de papel a Onofre y este pronuncio unas palabras, y
el árbol empezó a moverse y sus raíces empezaron a salir del suelo, cogió a los
caballos con sus ramas, con las ramas hizo un tipo de pared para protegernos a
nosotros y a los caballos. Salió hacia los soldados e iba arrollándolos y
cogiéndolos con las raíces y arrojándolos por los aires. Onofre lanzaba flechas
con su ballesta y los soldados aragoneses con arcos u objetos arrojadizos los lanzaban
hacia el árbol con la intención de darles a sus ocupantes sin éxito alguno. Ya
atravesaron al ejército y se dirigían hacia el puerto de Valencia. A dos
kilómetros del puerto pararon al árbol y lo plantaron de nuevo para no llamar
la atención. Siguieron con los caballos hasta el puerto, donde se encontraban
el pequeño ejército que fue de Navarra, unos 200 soldados con un barco
esperando a ellos:
-General:
Hola, Mi señor. Estábamos esperándole, el barco de Wilfredo ha salido hace seis
horas. Mejor que salgamos ya.
-Gastón:
vamos rápido al barco, que hay prisa.
Todos
entraron al barco, los soldados se pusieron a remar, porque tenían mucha prisa
por pillar a Wilfredo. Ya pasando por el canal entre las islas de Córcega y
Cerdeña, avistaron al barco aragonés pero estaban muy lejos de él.
Lázaro: No
vamos a conseguirlo, como lleguen a la orilla del reino de Nápoles, perderé a
mi hija.
Onofre:
tranquilo se me ha ocurrido una idea, Raimundo déjeme los pergaminos, rápido.
Raimundo:
Vale pero no hagas ninguna locura.
Onofre cogió
los pergaminos, empezó a revisarlos hasta que paró la mirada en la tercera
página en la de hechizos de agua. Pronuncio unas palabras y el barco empezó a
acelerar un soldado miro en el agua y el hechizo había creado una corriente.
Mientras en
el otro barco Wilfredo vio que perdían distancia y se acercaban a una velocidad
enorme.
-Wilfredo: ¡¡
Vamos preparad los cañones!! , no nos pueden alcanzar o estamos perdidos.
-Lucrecia:
Te van a alcanzar y te van a dar de lo tuyo.
-Wilfredo:
Cállate perra, podría tirarte por la borda con una roca atada a la espalda.
Ya en el
barco de Gastón estaban esquivando como podían las balas de cañón, ellos
empezaron también a preparar el cañón para disparar.
Gastón:
¿Está preparado el cañón?
Soldado: Si
mi rey.
Gastón:
¡Pues dispara ya!
El disparo
tuvo tal precisión que le dio en toda la vela y paro al barco aragonés. El
barco de Wilfredo se acerco y empezó la lucha entre los dos bandos. Esta
batalla parecía un abordaje de piratas a un buque lleno de tesoros. En este
caso los piratas eran la parte de Gastón, los soldados de Gastón estaban ganando
con diferencia ya que habían matado a la mitad de los soldados aragoneses.
Cuando quedaban unos 30 soldados aragoneses se rindieron pero por venganza los
ataron a unas piedras y los tiraron al mar, muriendo con una muerte fatal.
Wilfredo
intento huir, aunque en un barco parecía muy difícil. Pero cogió una barca que
estaba atada al barco con Lucrecia, retenida.
-Wilfredo:
Jajajaja, solo queda un kilometro para llegar a la costa y estaré salvado.
Todos
pensando que ya no había nada que hacer porque no había tiempo ya que la barca
estaba a 200 metros del barco de Wilfredo y tenían que ir a su barco y
pronunciar otra vez el hechizo y pillar carrerilla.
-Lázaro:
Mierda, he perdido a mi hija ya estábamos tan cerca de conseguirlo…
-Onofre:
Espera, todo no está perdido todavía me queda una flecha.
Onofre se
situó en la proa del barco y apuntaba a Wilfredo, estaba muy nervioso y le
sudaban las manos. Pero pensó en lo mal que le trato su padre todos estos años
y disparó sin pensar. Todos rezaban porque esa flecha llegara a su destino… Y
así lo hizo, le dio en toda la nuca y murió de inmediato. Onofre estaba muy
deprimido pero Raimundo y Gastón le animaron.
Rescataron a
Lucrecia de la barca y volvieron a Aragón. Allí llegaron al castillo de Aragón
donde en el trono estaba el hermano mayor de Onofre, Aznar. Onofre le retó a un
duelo por el trono, en principio no acepto, aunque era mucho más fuerte y
habilidoso con la espada, antes de que Onofre se aventurara a esta misión, lo
que le hizo cambiar de idea fue que sino los reinos de Castilla, Portugal y
Navarra irían a por él. Por ello aceptó.
Los dos
luchaban con dos armas, Aznar cogió un escudo y una espada, mientras Onofre
cogió una espada y una ballesta y empezó la batalla. Onofre empezó a dispararle
flechas con la ballesta aunque con el escudo se protegía su hermano. Ya lo s
dos empezaron a luchar cuerpo a cuerpo, Aznar atacaba con la espada mientras
Onofre solo podía defenderse, Aznar lo tiro al suelo y su espada salió volando,
pero todavía tenía su ballesta. Aznar encima de él iba a clavarle la espada y
Onofre puso una flecha en la ballesta y justo cuando iba a disparar, Aznar lo
mató clavándole la espada. Todos los reyes estaban desolados, habían matado a
Onofre, pero entre el público Raimundo pronunció unas palabras y el cuerpo sin
vida de Onofre empezó a moverse y desde el suelo, Onofre cogió muy débil la
ballesta y le dio a Aznar en la espalda él se dio la vuelta dolorido y este
disparó otra flecha que le dio justo en el corazón, y todos alucinados
empezaron a aplaudir. Onofre se dirigió hacia Raimundo y le giño el ojo y la
respuesta de Raimundo fue la misma.
Onofre se
dirigió a la plaza más importante de la zona y anunció algo.
-Ahora soy
el rey de este reino, mientras dure en este mandato será un reino pacífico y
bueno con su gente y con los demás reinos cristianos.
Todas las
personas allí presentes empezaron a aplaudir.
Ya en el
castillo Onofre dio a Raimundo el cargo de consejero y maestro del rey, el muy
contento aceptó.
Después los
reyes de Castilla, Portugal y Navarra fueron al castillo de Gastón. Allí solos
en una habitación Gastón y Lucrecia, empezaron a hablar, hasta que Gastón se
armo de valor se arrodillo y le pidió matrimonio a Lucrecia, ella dijo que sí.
Después Gastón le pidió el consentimiento a Lázaro que aceptó.
Dos años
después de casarse, ya tenían dos hijos y eran muy felices, los cuatro reinos
cristianos se llevaban muy bien e iban conquistando tierras musulmanas.
FIN.
DE: José Gabriel Góngora
Medina 3ºD
Valoro positivamente el enorme trabajo que has hecho, sobre todo en lo que a cantidad se refiere.
ResponderEliminarNo me gustan al gunas cosas:
- La historia es liosa, precipitada y con algunos episodios, según mi opinión incoherentes. Es como si quisieras meter como fuese elementos para hacerla más atractiva, y por el contrario, la hacen menos creíble y dinámica. Por ejem, un druida en Navarra, y sus intervenciones "mágicas" no pegan.
Sorprende también lo fácilmente que hacer alianzas, complicidades, ayudas desinteresadas personajes que acaban de conocerse: ¿podéis ayudarme? (nada más entrar en la estancia, sin sustos, gritos ni sobresalto) y la otra responde: "claro, pero disfrazaos" y más tarde:"ehhhh..." No es creíble.Además, casi de inmediato, "se iba enamorando de ella"
- La redacción hace más difícil seguir el hilo argumental. Apenas pones puntos, repites mucho entonces, malas expresiones como: he sido enterado, su aspecto físico es, mi tribu y esta tribu...
- ortografía regular: yendo, no hiendo; ah es verdad, y no a es verdad
NOTA:8