miércoles, 5 de diciembre de 2012

TRABAJO PRIMER TRIMESTRE : EDUARDO JOYA PEÑA


TRAMAS Y TRAICIONES
         Los ejércitos papales, liderados por el cardenal Guartoi, llegaron a la ladera del Vesubio donde acamparon. Diez mil hombres aguardaban las órdenes del Papa Bonifacio II y esperaban la llegada del ejército aliado del noble más poderoso de la Península Itálica , el duque de Lavezti.
         Después de tres días de espera, apareció el duque encabezando sus tropas hacia el campamento del Papa.
         Pero todo esto no es ni el principio , ni el final de la historia.
         Todo esto ocurrió después de que el Papa recibiera a un emisario del sultán Azmeny, pidiendo la rendición del pueblo cristiano y la entrega de todos sus bienes ya que el Papa, en su labor de cristianizar al mundo, mandó a su ejército a ocupar los territorios del norte de África, gobernados en ese momento por el general Albalá, hermano y sucesor del sultán Azmeny . Allí se libró una feroz batalla que acabó con el violento desenlace del asesinato del general y de toda su familia .  
         El Papa rechazó las exigencias del emisario procedente del norte de África y éste amenazó con enviar a su ejército para destruirlos.
         Pasaron unos meses, incluso más tiempo , pero el sultán no dio mas signos de vida . A mediados del mes de abril del año 1519 se produjo un desembarco de tropas en la isla de Sicilia por parte del sultán Azmeny.
         El Papa pidió ayuda al rico y noble duque de Lavezti .
         Mientras las tropas del sultán tomaron la isla de Sicilia, los generales del Papa junto con al cardenal y el noble, planificaban la estrategia para rechazar la invasión musulmana.
         El  duque de Lavetzi era una persona alta, corpulenta y con unos rasgos faciales muy agravados , mientras que el cardenal era una persona fría , poco sociable y muy religiosa. Cada uno tenía una postura para resolver el problema. El duque proponía atacar la isla de Sicilia y expulsar a los musulmanes , en cambio Guartoi, proponía hacerse fuertes en la península y rechazar la invasión desde ésta.
        Al final , el Papa , persuadido por el cardenal y sus obispos  accedieron a la propuesta de éste . Así pues, los soldados del Papa fueron a la ciudad de Nápoles y allí establecieron el nuevo campamento.
        A mediados del mes de septiembre se supo que el ejército musulmán estaba formado por tribus bereberes del norte de África (40.000 soldados a pie y 5.000 soldados a camello y caballo).          
        Mientras tanto, en Roma, muchos cardenales conspiraban contra el Papa Bonifacio y tramaban derrocarlo de su puesto. Los cardenales procedentes de Francia,  España y Portugal pretendían mantener la autoridad del Papa actual pero los demás cardenales católicos querían derrocarlo. Al final, tras una serie de desapariciones y asesinatos , los seguidores del Papa Bonifacio consiguieron callar las voces de muchos cardenales que pretendían quitarlo del poder.
       Los generales del sultán llevaron a sus tropas conquistando las ciudades de Palermo , Mesina , Tarento , Bari … hasta acampar a un kilómetro y quinientos metros de Nápoles donde aguardaban los soldados que defendían el territorio.
       Tras resolver los acontecimientos en Roma, el Papa volvió a centrarse en la defensa de la península Itálica. Los 20.000 soldados de infantería y los 2500 soldados de caballería se dispusieron en una amplia llanura  donde el sol caía como si de flechas se tratase , pero los soldados se mantuvieron firmes. Mientras, en el otro lado de la llanura se dispusieron los soldados africanos, que doblaban en número a los defensores.  El ejército africano atacó como si de una jauría de perros se tratase , todos corriendo como alma que lleva el diablo y gritando como si se tratase de la última vez. Al ver esto,  en el bando cristiano corrió un escalofrío pero al poco tiempo, la adrenalina y el nerviosismo hicieron que ese miedo se transformara en rabia y cargaran contra el enemigo  con más ahínco.
        Los dos ejércitos chocaron con mucha fuerza y algunos soldados salieron despedidos. La batalla duró unas cuantas horas en la que muchos soldados murieron y otros tantos fueron heridos pero ninguno de los contingentes daba su brazo a torcer ni se rendía. Sobre las ocho de la tarde, los dos ejercito se retiraron del campo de batalla y recogieron a sus muertos.
         Más tarde, todos los generales del Papa y el duque discutieron sobre la forma de atacar a los árabes y al final llegaron a la conclusión de que el ataque tendría que hacerse esa misma madrugada. Los soldados sin tiempo para enterrar a los muertos y recuperarse del todo, marcharon hacia el campamento enemigo en un silencio absoluto y a falta de unos cuantos metros los árabes dieron la voz de alarma pero era tarde, ya que los soldados habían entrado en el campamento y estaban matando a todo el mundo. Más de la mitad de los soldados acampados lograron huir, pero los cristianos hicieron que se retiraran hasta el emplazamiento que tenían a mas de 6 km, y a marchas forzadas consiguió llegar casi todo el grueso del ejército musulmán.
         Tras su regreso a Roma el Papa fue recibido como un héroe y después de conceder una serie de favores al emperador de España, éste ofreció tropas para echar a los musulmanes de los Estado de la Iglesia.
         El duque Lavezti envidiaba al Papa por haber recibido honores y todo el prestigio. Por eso, decidió quitarle su apoyo y tras una serie de sobornos logró poner de su parte a muchos ricos y cardenales para destituir a este Papa. Tres meses después de la victoria, el Papa murió, según el informe oficial, de muerte natural, aunque algunos presuponían que lo habían matado el duque y sus apoyos.
         Los dos nuevos candidatos a Papa propuestos fueron Guartoi y un cardenal procedente de España, Benedicto Borcía que finalmente se convirtió en su Nueva Santidad ya que el duque sobornó a los cardenales votantes. Este Papa junto con el duque protagonizaron muchas guerras de fe contra los musulmanes, conquistando las costas africanas y contra los judíos, expulsándolos de la península Itálica.
                                                FIN

1 comentario:

  1. Buen relato. Es una pena que no profundices un poco más en las descripciones de personajes, lugares o sitiuaciones, porque cuando lo has hecho,poco, la narración ha ganado en intensidad. Sólo tengo un pequeño reparo: la historia podía ser algo más extensa y el final menos precipitado
    NOTA:10

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